¿Estás planeando un viaje a Nepal? Hoy te llevaremos al vibrante y misterioso corazón de Nepal: Katmandú. Esta ciudad no solo es la capital del país, sino también un crisol de culturas, historia y espiritualidad. Con sus antiguas pagodas, templos sagrados y callejones llenos de vida, Katmandú es un destino que fascina a cualquier #buenviajero. Si te estás preguntando qué ver y qué hacer en Katmandú, además de lo típico, has llegado al lugar correcto.
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Tabla de contenidos
Lugares imprescindibles que ver en Katmandú
- Plaza Durbar: El alma histórica de Katmandú
No hay mejor lugar para comenzar tu aventura que en la Plaza Durbar de Katmandú. Este es el centro histórico y cultural de la ciudad, un lugar donde el tiempo parece haberse detenido. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la plaza está rodeada de palacios antiguos, templos y santuarios que datan de los siglos XII al XVIII. El Palacio Hanuman Dhoka, antigua residencia de la realeza nepalí, es una visita obligada. Recorriendo sus patios y observando las tallas de madera intrincadas de los templos, como el Templo de Taleju o el Kumari Ghar (la casa de la diosa viviente), te sumergirás en la rica historia del valle de Katmandú.
- Swayambhunath: El templo de los monos
Conocido comúnmente como el Templo de los Monos debido a los simios que viven en sus colinas, Swayambhunath es otro icono de Katmandú que no te puedes perder. Este antiguo complejo religioso ofrece una mezcla única de hinduismo y budismo. La estupa principal, con su famoso par de ojos de Buda mirando en las cuatro direcciones, es uno de los símbolos más reconocibles de Nepal. Desde la colina de Swayambhunath, podrás disfrutar de una vista panorámica espectacular de Katmandú, especialmente al amanecer o al atardecer.
- Boudhanath: La gran Estupa
A pocos kilómetros del centro de la ciudad se encuentra Boudhanath, una de las estupas más grandes del mundo y un centro vital para la comunidad budista tibetana en Nepal. Pasear alrededor de la estupa, observando a los devotos girar las ruedas de oración mientras recitan mantras, es una experiencia que te llenará de paz y te permitirá conectar con la espiritualidad que impregna cada rincón de Katmandú. No olvides hacer una parada en una de las terrazas de los cafés cercanos para disfrutar de un buen té masala mientras observas la vida diaria de este lugar sagrado.
- Pashupatinath: El corazón espiritual del Hinduismo
Otro de los puntos imprescindibles en Katmandú es Pashupatinath, uno de los templos hinduistas más sagrados de Nepal. Situado a orillas del río Bagmati, este lugar es famoso por sus ceremonias de cremación al aire libre, lo que proporciona una visión cruda pero respetuosa de la vida y la muerte según la tradición hindú. Aquí, podrás ver a los sadhus, los santos hombres con sus cuerpos pintados de ceniza, viviendo una vida de renuncia y meditación. Pashupatinath no solo es un lugar de devoción, sino también un espacio para la reflexión y la comprensión de la cultura nepalí.
- Thamel: El barrio de los viajeros
Después de un día lleno de visitas espirituales y culturales, ¿qué tal un poco de entretenimiento y compras? El barrio de Thamel es el epicentro de la vida nocturna y la actividad comercial en Katmandú. Con sus calles llenas de tiendas de recuerdos, ropa de montaña, artesanías locales y cafeterías, Thamel es el lugar perfecto para perderse y dejarse llevar por el ambiente vibrante y cosmopolita. Prueba algunos platos locales en los restaurantes de Thamel, como el momo (una especie de empanadilla) o el dal bhat (plato tradicional de arroz y lentejas). Además, por la noche, Thamel se transforma en un lugar de música en vivo y bares animados, perfecto para conocer a otros viajeros y compartir experiencias.
- Patan y Bhaktapur: más allá de Katmandú
Si dispones de tiempo, no te limites solo a Katmandú. Muy cerca de la capital se encuentran las ciudades de Patan y Bhaktapur, cada una con su propia Plaza Durbar. Patan, también conocida como Lalitpur, es famosa por su exquisita arquitectura newar y su vibrante escena artística. No te pierdas el Museo de Patan, uno de los mejores de Nepal, que alberga una increíble colección de arte religioso. Por otro lado, Bhaktapur ofrece un viaje en el tiempo con sus calles empedradas y edificios medievales. Aquí, podrás admirar el Palacio de las 55 Ventanas y la Puerta de los Leones, mientras disfrutas de un delicioso king curd, un tipo de yogur local.
Experiencias Auténticas: Más Allá de los Lugares Turísticos
Si buscas una experiencia más auténtica, te recomendamos explorar los barrios menos turísticos de Katmandú. Puedes unirte a una clase de cocina local para aprender a preparar momos o asistir a una clase de meditación en uno de los muchos monasterios budistas de la ciudad. Además, si te gustan las actividades al aire libre, Katmandú ofrece múltiples opciones de senderismo en sus alrededores. Las caminatas por el Valle de Katmandú no solo te permitirán disfrutar de la naturaleza, sino también descubrir pequeños pueblos y templos escondidos.
Nagarkot, Kirtipur, Dulikhel o Panauti son excelentes opciones para conocer la vida rural de Nepal y conocer a sus habitantes de una forma real y cercana. Puedes probar alguna de las experiencias de turismo comunitario que ofrece Community Homestay Network y pasar un día o dos con una familia local. Seguro que esta será la experiencia que más recuerdes de tu viaje.
Dónde comer y dónde relajarte en Katmandú
Como en cualquier gran ciudad, encontrar restaurantes en Katmandú no es difícil. Sin embargo, encontrar un lugar con múltiples opciones que sean suaves para el estómago puede ser más complicado. Para estar seguro, come en un restaurante de Thamel, donde hay una buena mezcla de comida nepalí e internacional. Si te apetece probar algo más que dal bhat, puedes probar el Brick’s Café en Patán o el Yak Restaurant en Thamel. Este lugar es turístico, pero el ambiente es muy acogedor y único. Aquí se puede probar auténtica comida nepalí, pero el menú tiene una gran variedad de opciones diferentes.
La cerveza es cara en Nepal, al igual que muchos otros productos de importación similar. Pero lo que no es muy caro es la cerveza de mijo, llamada tongba. Tiene un sabor interesante, a alcohol, pero es caliente y divertida de probar. Se puede pedir en muchos restaurantes de Katmandú, incluidos el Yak Restaurant y otros muchos en Thamel.
Katmandú puede resultar caótica para algunas personas, pero si acabes de llegar de un trekking o un viaje más aventurero, te puede proporcionar una enorme sensación de alivio. Si necesitas tiempo para recuperarte después del trekking, y quieres salir un poco de tu habitación de hotel, pero no te apetece necesariamente hacer «trekking» por Thamel, entonces visita el Jardín de los Sueños. Solo con echar un vistazo al interior, el lugar parecía increíble. El jardín fue en su día el jardín privado del káiser Shumsher Jang Bahadur Rana (ex primer ministro de Nepal), y hoy está lleno de fuentes, edificios, pabellones, restaurantes…
Y si lo tuyo es el Yoga, la meditación o lo que necesitas es un buen masaje, reserva una de las actividades que ofrece el Avata Wellness Centre. Oculto en medio de la ajetreada y bulliciosa Katmandú, este lugar es un remanso de paz. Es un espacio acogedor con su silencio y su vegetación, y en su cafetería, ‘Nourish’, podrás tomar una bebida refrescante o un delicioso plato bien balanceado para completar la experiencia de cuerpo y mente.
Festividades: Celebrando con los Locales
Si tenéis la suerte de visitar Katmandú durante una de sus festividades, os espera una experiencia inolvidable. Entre las más importantes se encuentran el Festival de Dashain, el más grande y esperado de Nepal, o el Tihar, también conocido como el festival de las luces. Durante estos eventos, la ciudad se llena de colores, música, danzas y rituales tradicionales que os permitirán conocer la cultura nepalí de una manera única.
En resumen…
…Katmandú es mucho más que una ciudad de tránsito hacia las montañas del Himalaya. Es un destino en sí mismo, lleno de historia, espiritualidad y vida. Desde las antiguas plazas de los palacios hasta los bulliciosos mercados y los tranquilos monasterios, Katmandú es un lugar que toca el corazón de todo aquel que lo visita. Así que, si estás planeando tu próxima aventura, recuerda que el auténtico corazón de Nepal te espera con los brazos abiertos.
¡Namasté y buen viaje!
